Por GREG BEACHAM
The Associated Press
LOS ANGELES -- Josesito Lopez y Saúl "Canelo" Alvarez se pararon juntos y frente a frente, durante la ceremonia del martes en la histórica calle Olvera. De pronto, López, quien luce como el enemigo pequeño, fue quien miró hacia abajo a su rival, al ser más alto.
Quizás su pelea, pactada para el 15 de septiembre, no sea un duelo tan desigual después de todo. Tal vez López sí tiene otra oportunidad de dar otra sorpresa increíble.
El combate representa el capítulo inesperado más reciente en la carrera de López (30-4, con 18 nocauts), un púgil prácticamente desconocido fuera del sur de California antes del mes pasado. Con apenas cuatro semanas para prepararse como sustituto de último minuto, su victoria sobre el astro welter Víctor Ortiz lo catapultó a la fama.
Después de que tres posibles rivales del "Canelo" no pudieron pelear, López aprovechó la oportunidad y aceptó la invitación para ascender una categoría y medirse a Alvarez, el ídolo mexicano en ciernes, campeón superwelter (69 kilos o 154 libras) y uno de los púgiles con mejor "punch" en la actualidad.
López tuvo ya un logro digno de una película de "Rocky" en este año. Sin embargo, considera que a este filme le restan todavía varios capítulos.
"Definitivamente no soy el favorito otra vez, pero daré todo en el ring", dijo López. "Pelearé con todo el corazón. Me gusta pensar que puedo dar un buen golpe".
López y Alvarez anunciaron formalmente su pelea en un parque céntrico de Los Angeles, frente a cientos de seguidores. Aunque Alvarez y López sólo se ocupan de la preparación para el combate, sus promotores deben atender también por otra pelea que se realiza en un par de meses en Las Vegas.
En una rareza del boxeo, la función boxística promovida por Golden Boy en el MGM Grand Garden se realizará en la misma avenida Tropicana donde Top Rank ofrecerá otra velada en el cuadrilátero, que incluye el esperado combate de los medianos entre el mexicano Julio César Chávez hijo y el astro argentino Sergio García Martínez, en el Thomas and Mack Center.
Ni el director general de Golden Boy, Richard Schaefer, ni el de Top Rank, Bob Arum, quisieron dar un paso atrás para mover su función programada en el fin de semana en que se celebra la Independencia de México. Se trata de una de las fechas más importantes en el calendario del boxeo.
La función de Top Rank se difundirá en la modalidad de pago por ver en televisión, mientras que la de Golden Boy no tendrá costo adicional para los suscriptores de Showtime.
"Vamos a hacer lo que necesitamos desde una perspectiva de negocios", dijo Schaefer. "No vamos a dejarnos influenciar por lo que hace Bob Arum... Si tienes una opción y puedes darte el lujo de no ofrecer la función en pago por ver, probablemente lo mejor para los boxeadores sea hacer esto".
Alvarez (40-0-1, con 29 nocauts) trató de no distraerse mientras varios rivales iban y venían en semanas recientes.
El mexicano rechazó que se encuentre en una situación incómoda por enfrentar a un púgil a quien nadie considera favorito pero que tiene la intención de dar una campanada.
"Creo que todos tienen algo que ganar", dijo Alvarez, que cumple 22 años el miércoles. "Mi tarea es prepararme para cualquier oponente que tenga. Sé que él se ganó el derecho a esta pelea.
Quizás su pelea, pactada para el 15 de septiembre, no sea un duelo tan desigual después de todo. Tal vez López sí tiene otra oportunidad de dar otra sorpresa increíble.
El combate representa el capítulo inesperado más reciente en la carrera de López (30-4, con 18 nocauts), un púgil prácticamente desconocido fuera del sur de California antes del mes pasado. Con apenas cuatro semanas para prepararse como sustituto de último minuto, su victoria sobre el astro welter Víctor Ortiz lo catapultó a la fama.
Después de que tres posibles rivales del "Canelo" no pudieron pelear, López aprovechó la oportunidad y aceptó la invitación para ascender una categoría y medirse a Alvarez, el ídolo mexicano en ciernes, campeón superwelter (69 kilos o 154 libras) y uno de los púgiles con mejor "punch" en la actualidad.
López tuvo ya un logro digno de una película de "Rocky" en este año. Sin embargo, considera que a este filme le restan todavía varios capítulos.
"Definitivamente no soy el favorito otra vez, pero daré todo en el ring", dijo López. "Pelearé con todo el corazón. Me gusta pensar que puedo dar un buen golpe".
López y Alvarez anunciaron formalmente su pelea en un parque céntrico de Los Angeles, frente a cientos de seguidores. Aunque Alvarez y López sólo se ocupan de la preparación para el combate, sus promotores deben atender también por otra pelea que se realiza en un par de meses en Las Vegas.
En una rareza del boxeo, la función boxística promovida por Golden Boy en el MGM Grand Garden se realizará en la misma avenida Tropicana donde Top Rank ofrecerá otra velada en el cuadrilátero, que incluye el esperado combate de los medianos entre el mexicano Julio César Chávez hijo y el astro argentino Sergio García Martínez, en el Thomas and Mack Center.
Ni el director general de Golden Boy, Richard Schaefer, ni el de Top Rank, Bob Arum, quisieron dar un paso atrás para mover su función programada en el fin de semana en que se celebra la Independencia de México. Se trata de una de las fechas más importantes en el calendario del boxeo.
La función de Top Rank se difundirá en la modalidad de pago por ver en televisión, mientras que la de Golden Boy no tendrá costo adicional para los suscriptores de Showtime.
"Vamos a hacer lo que necesitamos desde una perspectiva de negocios", dijo Schaefer. "No vamos a dejarnos influenciar por lo que hace Bob Arum... Si tienes una opción y puedes darte el lujo de no ofrecer la función en pago por ver, probablemente lo mejor para los boxeadores sea hacer esto".
Alvarez (40-0-1, con 29 nocauts) trató de no distraerse mientras varios rivales iban y venían en semanas recientes.
El mexicano rechazó que se encuentre en una situación incómoda por enfrentar a un púgil a quien nadie considera favorito pero que tiene la intención de dar una campanada.
"Creo que todos tienen algo que ganar", dijo Alvarez, que cumple 22 años el miércoles. "Mi tarea es prepararme para cualquier oponente que tenga. Sé que él se ganó el derecho a esta pelea.
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